"Jack me aseguró que hará esfuerzos para que al menos una letra (de su firma) sea legible, con el objetivo de no desvalorizar nuestra moneda". El comentario no fue de un docente a un alumno al que no le entendía la caligrafía. Toda broma tiene algo de cierto y peor cuando hay plata de por medio. La frase pertenece al presidente de los Estados Unidos, Barack Obama. Y Jack es nada menos que Jacob Lew, el flamante secretario del Tesoro estadounidense. Esa misma dependencia difundió el martes pasado, vía Twitter, un billete en el que figura la nueva firma de Lew,. La anterior era algo parecido a un garabato ininteligible (se parecía a un resorte o a un cable de teléfono), lo que provocó numerosas bromas en las redes sociales.
"No me había fijado antes en su firma. Ahora Jack me garantizó que trabajará para hacer que, por lo menos, una letra de su firma sea legible", ironizó Obama.
La firma del secretario del Tesoro había sido caratulada como la peor del mundo por revistas especializadas estadounidenses.
A fines de febrero pasado, Jacob Lew fue nominado para reemplazar a Timothy Geithner. Hasta entonces se desempeñó como jefe de gabinete de Obama. Lew es uno de los expertos diplomados en la Universidad de Harvard y obtuvo un doctorado en derecho por la Universidad de Georgetown. También se desempeño como asesor del presidente Bill Clinton lo en 1993.
Lew, de 57 años, es un judío observante que no trabaja los días sábados por shabat. Sostienen que es muy respetado y cosechó buenas migas en Washington tanto con los demócratas como con los republicanos.